¿Cuándo se descubrió por primera vez el litio como fármaco para la salud mental y cuál es la historia de este medicamento? ¿Cómo funciona realmente? ¿Y cuál es el pensamiento y la controversia actuales considerando el papel del litio en el tratamiento de la enfermedad bipolar?
Descubrimiento
El litio es un elemento natural (número tres en la tabla periódica) que se descubrió por primera vez en 1817 y se encontró en minas en Australia y Chile. Sin embargo, sus efectos estabilizadores del estado de ánimo no se reconocieron hasta finales de ese siglo. De hecho, algunos concluyeron que la gota era la causa de los trastornos del estado de ánimo.
Históricamente, los manantiales minerales ricos en litio han sido promocionados por sus propiedades curativas. Se usó por primera vez para la manía a fines del siglo XIX, con Dinamarca a la cabeza, pero se publicó poco sobre el medicamento durante más de medio siglo.
Fue el psiquiatra australiano John Cade quien, en 1949, publicó uno de los primeros artículos sobre el uso del litio en el tratamiento de la manía aguda. A partir de ese momento, se prescribió cada vez más el litio.
La Administración de Drogas y Alimentos de los EE. UU. (FDA) no aprobó el uso del litio hasta 1970. El uso del litio en los EE. UU. Comenzó más tarde y pasó a otros fármacos antes, en comparación con muchos otros países del mundo.
Cómo funciona
Sabiendo que el litio es un elemento natural, uno podría pensar que recetar el medicamento puede respaldar una deficiencia. Sin embargo, la investigación nunca ha indicado que ese trastorno bipolar sea causado por una deficiencia de litio. Más bien, sucede que esta sustancia natural tiene el afortunado efecto de actuar como estabilizador del estado de ánimo.
Durante más de 50 años, las personas maníaco-depresivas fueron tratadas con litio a pesar de que la ciencia médica no tenía una comprensión clara de por qué o cómo funcionaba. (El nombre de trastorno maníaco-depresivo se cambió oficialmente a trastorno bipolar en 1980).
Aunque no se conocen completamente los mecanismos exactos por los cuales el litio ejerce sus efectos estabilizadores del estado de ánimo, ha habido mucha investigación contemporánea sobre esta cuestión. El litio interactúa con varios neurotransmisores, receptores de neuronas y otros sistemas químicos en las células del cerebro.
Neurotransmisores y salud mental
¿Cómo viajan los mensajes en una parte del cerebro y, al hacerlo, resultan en acciones? Solo en las últimas décadas, cuando los científicos han aislado neurotransmisores, los mensajeros químicos del cerebro que actúan para transmitir información de una región a otra, comenzamos a comprender este proceso.
Los neurotransmisores están contenidos en el extremo de una neurona (o nervio). Un impulso eléctrico viaja a lo largo del nervio y produce la liberación de neurotransmisores en el espacio (la sinapsis) entre un nervio y el siguiente. Algunos neurotransmisores se unen a los receptores de la siguiente célula nerviosa, que responden transformando ese mensaje en otro impulso eléctrico.
Los neurotransmisores que quedan en la sinapsis (los que no se unen a los receptores de la siguiente neurona) se devuelven a la neurona original para volver a utilizarse.
Existen varios tipos de neurotransmisores en el cerebro. Algunos de estos incluyen:
- Serotonina
- Norepinefrina
- Dopamina
- Acetilcolina
- GABA (ácido gamma-aminobutírico)
- Glutamato
Se cree que el litio interactúa con muchos de estos sistemas de formas complejas.
Otros usos potenciales
Además del trastorno bipolar, el litio a veces se usa en el tratamiento de la depresión unipolar (depresión mayor) y el trastorno esquizoafectivo.
Debido al efecto estabilizador del litio sobre los receptores de glutamato, los científicos también están estudiando si este medicamento puede proteger de la muerte celular que ocurre en afecciones como la enfermedad de Parkinson, Huntington y Alzheimer.
Toxicidad y efectos secundarios
Como ocurre con muchos medicamentos en el mercado, el litio viene con una lista de efectos secundarios y precauciones. La toxicidad del litio puede ser muy grave, con efectos tanto agudos como crónicos. Los efectos secundarios del litio también son comunes y, como ocurre con muchos medicamentos para la salud mental, estos efectos secundarios a menudo interfieren con su uso.
Además, se sabe que el litio interactúa con una amplia variedad de medicamentos, como otros medicamentos para la salud mental, medicamentos para la presión arterial y algunos analgésicos.
Hay pocos medicamentos disponibles para el tratamiento del trastorno bipolar que no tengan efectos secundarios importantes.
Papel en el tratamiento del TLP
La respuesta a la pregunta "¿Qué papel debería desempeñar el litio en el tratamiento de la enfermedad bipolar en la actualidad?" variará dependiendo de a quién le preguntes y dónde vivas.
Además de la historia de una montaña rusa, existen opiniones muy diferentes sobre el uso del litio en la actualidad. Algunos médicos han calificado al litio como una "tontería peligrosa", mientras que otros ven al litio como el tratamiento a largo plazo mejor establecido disponible para el trastorno bipolar. Algunos profesionales afirman que el litio es el tratamiento más importante que se ha descubierto para la salud mental.
Al igual que con muchos otros problemas relacionados con la salud mental, la respuesta real probablemente se encuentre en algún lugar entre estos extremos y se refleje en diferentes prácticas en todo el mundo.
Estados Unidos tiene la reputación de ser el "último en entrar y el primero en salir" con respecto al uso de la droga, llegando tarde entre los países a adoptar su uso y temprano en recomendar alternativas (otros estabilizadores del estado de ánimo como Depakote (ácido valproico) y medicamentos antipsicóticos).
En los EE. UU., El litio rara vez se usa como tratamiento de primera línea para las personas con trastorno bipolar, aunque todavía se usa con frecuencia para el trastorno bipolar grave en combinación con otros medicamentos.
Sin embargo, un estudio de 2017 sugirió que el litio de primera línea tiene un papel importante en el tratamiento de la manía en los ancianos. También hay evidencia que respalda el papel del litio en la disminución del riesgo de suicidio.
La línea de fondo
La historia del litio es un estudio interesante en el descubrimiento científico y los métodos que los científicos han utilizado para investigar la naturaleza química de los trastornos del estado de ánimo en el cerebro.
Esta nueva comprensión de los mensajeros químicos en el cerebro responsables de los trastornos de salud mental es importante para reducir aún más el estigma de los trastornos de salud mental. Si bien aún queda un largo camino por recorrer, y la salud mental todavía sufre más estigma que las enfermedades cardíacas, las investigaciones que se están llevando a cabo en la actualidad, como el mecanismo por el cual funciona el litio, son un excelente paso en la dirección correcta.