La menta (Mentha piperita) se usa comúnmente para dar sabor a los alimentos, especialmente los dulces. El aceite y las hojas de menta también se han utilizado para tratar una variedad de afecciones, desde acidez de estómago hasta dolores de cabeza por tensión.
En general, faltan investigaciones de apoyo para estos usos. ¿Una excepción? Reducir los síntomas del síndrome del intestino irritable (SII).
Este artículo analiza los beneficios para la salud de la menta y los posibles efectos secundarios. También cubre qué dosis se utilizan y qué buscar al comprarlo.
Beneficios de la salud
La menta se ha utilizado durante cientos de años para tratar una variedad de afecciones. Existe evidencia clínica anecdótica y limitada de que la hoja de menta y el aceite de menta pueden ayudar en el tratamiento de:
- Molestias por amamantar
- Acidez
- Cefalea tensional
- Alivio de las molestias durante los exámenes gastrointestinales.
La gente también ha usado la hierba de menta, que es una mezcla de menta acuática y menta verde para tratar otras afecciones. Algunos de estos incluyen sofocos, placa dental, mal aliento, dolor por herpes, estrés, náuseas matutinas, náuseas y vómitos.
No hay suficiente evidencia para saber con certeza si el aceite de menta puede proporcionar alguno de estos beneficios.
Resumen
La menta se ha utilizado para una amplia variedad de afecciones, desde acidez de estómago hasta sofocos. Sin embargo, los estudios de investigación no han encontrado suficiente evidencia de que la menta sea un tratamiento eficaz para estas afecciones.
Síndrome del intestino irritable
El aceite de menta se ha estudiado para el tratamiento del SII. Los estudios han proporcionado resultados prometedores, según una revisión de 2019.
El aceite de menta contiene L-mentol, que bloquea los canales de calcio en las células del músculo liso. Esto reduce los espasmos en los músculos gastrointestinales.
Además, el aceite de menta también contiene las siguientes propiedades:
- Antimicrobiano: reduce los microorganismos, como bacterias o virus.
- Antiinflamatorio: trata la inflamación.
- Antioxidante: protege las células del daño.
- Inmunomodulador: afecta el sistema inmunológico del cuerpo.
Todos estos pueden ser relevantes en el tratamiento del SII.
Se han realizado estudios de investigación para evaluar si el aceite de menta es mejor que un placebo para reducir los síntomas del SII.
En general, ha habido indicios de que el aceite de menta es tan eficaz como los antiespasmódicos recetados. Esto llevó al Colegio Americano de Gastroenterología a recomendar el aceite de menta como tratamiento de primera línea. Los antiespasmódicos ayudan a relajar los músculos lisos del tracto digestivo para reducir los síntomas.
Un estudio encontró que los niños con SII experimentaron significativamente menos dolor abdominal después de dos semanas de tomar suplementos de aceite de menta. Los resultados fueron dramáticos con el 75% de los niños experimentando alivio del dolor.
Posibles efectos secundarios
El aceite de menta generalmente se tolera bien, aunque hay algunos informes de efectos secundarios. Específicamente, algunos han informado ardor de estómago o sensaciones de ardor en el área rectal cuando lo usan para tratar el SII.
La hoja y el aceite de menta también pueden causar reacciones alérgicas que incluyen enrojecimiento, dolor de cabeza y llagas en la boca. También puede experimentar dermatitis (irritación de la piel) si usa aceite de menta en la piel.
El aceite de menta parece ser seguro cuando se toma en dosis estándar y se ha utilizado de forma segura en muchos ensayos clínicos. Sin embargo, se desconoce la seguridad de usar grandes cantidades de hojas de menta o aceite de menta.
Dosificación y preparación
No hay una dosis recomendada de menta o aceite de menta. Los estudios que investigan los efectos de la hierba en diferentes condiciones han evaluado varias dosis.
En un estudio, los pacientes recibieron un producto que contenía 90 miligramos (mg) de aceite de menta y 50 mg de aceite de alcaravea. Se tomó dos o tres veces al día durante un máximo de cuatro semanas.
En un estudio en el que participaron pacientes con SII, se utilizaron de una a dos cápsulas con recubrimiento entérico tres veces al día. Cada una de las cápsulas proporcionó 0,2 ml o 180 a 225 mg de aceite de menta.
Al igual que con cualquier remedio, es mejor consultar con su proveedor de atención médica antes de probar el aceite de menta.
Resumen
El aceite de menta puede causar algunos efectos secundarios, como acidez de estómago, sensación de ardor en el área rectal o reacciones alérgicas. No existe una dosis recomendada de aceite de menta, así que consulte con su médico antes de usarlo.
Qué buscar
El aceite de menta está disponible en forma líquida y en cápsulas. Vale la pena buscar cápsulas con recubrimiento entérico, especialmente si tiene IBS. Eso es porque protegen el aceite de ser degradado por el ácido en el estómago.
Cuando compre un producto o suplemento de aceite de menta, consulte la etiqueta de información del suplemento. Le dará información sobre el contenido del producto. Algunos productos contienen otros ingredientes.
Los Institutos Nacionales de Salud (NIH) sugieren buscar uno con un sello de aprobación de una organización externa que proporcione pruebas de calidad.
Estas organizaciones incluyen U.S. Pharmacopeia, ConsumerLab y NSF International. La certificación de una de estas organizaciones no garantiza la seguridad o eficacia del producto. Sí indica que el producto se fabricó correctamente, contiene los ingredientes de la etiqueta y no contiene niveles dañinos de contaminantes.
Resumen
Cuando compre cápsulas de aceite de menta, busque las que tengan una capa entérica, ya que no se disuelven en el estómago. Consulte la etiqueta para obtener información sobre los ingredientes y las pruebas de calidad.
Resumen
El aceite de menta se ha utilizado para tratar diversas afecciones. La mayoría de estos no están respaldados por investigaciones, aunque parece ser útil para aliviar el síndrome del intestino irritable. Los efectos secundarios pueden incluir acidez de estómago o sensación de ardor en el área rectal. Al comprar un suplemento de aceite de menta, busque un sello de aprobación de U.S. Pharmacopeia, ConsumerLab o NSF International.
Una palabra de Googlawi
Si está pensando en utilizar aceite de menta como suplemento, consulte con su médico. Ellos pueden ayudarlo a decidir si sería útil para su afección. También pueden ayudarlo a determinar la dosis que debe tomar.