La disfunción eréctil (DE) es la incapacidad de lograr o mantener una erección que dure lo suficiente para que un hombre tenga relaciones sexuales u orgasmos satisfactorios. Los episodios ocasionales de disfunción eréctil son comunes: el 43% de los hombres en los Estados Unidos experimentan dificultades eréctiles de vez en cuando.
Desde un punto de vista médico, no lograr una erección el 20% de las veces no suele ser motivo de preocupación. Si ocurre más del 50 por ciento de las veces, es probable que exista una razón física y / o psicológica subyacente para el problema.
También conocida como impotencia, la disfunción eréctil es más prevalente en hombres mayores. El 44% de los hombres de 60 a 69 años y el 70% de los hombres de 70 años o más experimentan dificultades de erección, en comparación con solo el 5% de los hombres menores de 40 años. Otros factores de riesgo incluyen la enfermedad vascular ( incluyendo diabetes e hipertensión), obesidad, tabaquismo, trastornos neurológicos, estados psicológicos (estrés, depresión), cirugía pélvica y traumatismos. Las opciones de tratamiento incluyen medicamentos orales, medicamentos intrauretrales, medicamentos inyectables, dispositivo de vacío, cambios en la dieta / hábitos u otras opciones, incluida la cirugía.
La disfunción eréctil puede ser el primer signo de un problema de salud más grave y debería dar lugar a una evaluación cardíaca (corazón) de referencia.